Más del 26% de la población es fumadora, diariamente se tiran miles de colillas y cuando los fumadores se agrupan en un punto concreto, como a las puertas de esta biblioteca universitaria, la limpieza del suelo puede verse seriamente comprometida.
Los filtros de las colillas estás compuestos por acetato de celulosa derivado del petróleo que además contiene restos de sustancias como el alquitrán o la nicotina, haciendo de este residuo un importante contaminante que tarda más de diez años en descomponerse y que pueden llegar a contaminar ocho litros de agua.
Por ello, el Ayuntamiento de Alcalá de Henares colabora con la Universidad de Alcalá para conseguir no sólo limpiar la zona un día concreto, sino habituar a las personas fumadoras a depositar correctamente las colillas apagadas en ceniceros y papeleras evitando suciedad en este y otros valiosos entornos.